Litto Nebbia: El Inventor del invento

El pase de diapositivas requiere JavaScript.

“En el baño de la Perla de Once compusiste La Balsa”, decía Javier Martinez, baterista de Manal, en los viejos estudios TNT y registraba para siempre el mito fundacional del rock nacional en el disco TANGO… Pero además de Tanguito claro, el otro partener del mito fue (obviamente) Litto Nebbia, que a más 50 años de aquél icónico momento por fin se decidió a contar ésta y muchas otras vivencias en su autobiografía: Mi Banda Sonora (La vida es un encuentro) de editorial AGUILAR.

La presentación oficial fue este viernes 26 de mayo en el CCK y de la mano de, nada más y nada menos que León Gieco. El músico y amigo de Litto, ofició de presentador, aunque, vale aclarar que más que nada ofició de “verborrágico lector”, ya que se la pasó repasando (casi) todo el libro, “re copado” con las anécdotas que Nebbia cuenta en cada uno de los 9 Tracks que conforman su biografía.

El libro cuenta además con un hermoso prólogo de otro amigo del músico, el gran Andrés Calamaro, que cariñosamente lo apoda como “el Inventor del invento”… aquí un extracto del mismo:

Nebbia es demasiado joven para haber sido creado por Dios en el octavo día de creaciones, pero me gustaría poder decir que así fue.

Natural de Rosario, en la Argentina, vivió una infancia humilde pero rica en valores musicales y en un formidable interés por el cine.

Bien se podría decir que Litto nació en el seno de una familia de músicos y que heredó la conducta y la bohemia de sus ancestros, que fueron músicos entrenados, cantantes inspirados y magos.

Hasta donde sabemos, un árbol genealógico que se pierde en Italia y en España…

Litto es sangre italiana pero poderosamente argentino y rioplatense; una mente —un alma— abierta en profunda sensibilidad a la armonía, la ética, el ritmo y las melodías. Siempre atento en una conversación frontal y regada de convicciones, anécdotas y contenidos musicales sensibles…”

Pero Nebbia llegó al CCK para compartir la presentación de su libro con lo que mejor saber hacer: música. Sentado al piano acompañó a Gieco, sólo cuando lograba que éste dejara de leer en voz alta los pasajes de su historia, con viejas y nuevas canciones, para el disfrute de una Sala Argentina colmada, que celebraba cada uno de sus temas en piano y voz. Se oyeron “Cuando una voz sea de todos”, “Tristeza en los andenes”, “Solo se trata de vivir”, “Canción sin puñales”, tema a pedido de su mujer, que compuso una nochebuena pero que no lo toca mucho porque en palabras suyas “Es un quilombo de acordes” y hasta se hizo tiempo para homenajear a Don Atahualpa Yupanqui.

Tan inclasificable como su autor, Mi banda sonora intercala, cual soundtrack, las escenas de su propia historia de vida, las de sus discos y canciones, sus amigos, su obsesión por las películas, tanto cómo cinéfilo o como autor de música incidental; sus compositores favoritos, sus giras y sus opiniones personalísimas del mundo de la música toda. Justamente uno de los capítulos se llama “Dónde hay que firmar” y es ilustrado, en palabras de León, “Por un músico chiquitito, con un lápiz en la mano y dos billetitos al costado, frente a dos sombras gigantescas que le hacen firmar un contrato, …buenísimo!!!”, decía León.

Como pastilla, cuenta Litto en ese pasaje sobre los derechos de autor que, por ejemplo, Los Shakers firmaron un contrato sin solución de continuidad, por el 1% de regalías de todas las ediciones “nacionales” y además se aclaraba que, en el caso que el disco fuera editado en el exterior, y como ellos eran uruguayos se editó en Uruguay, ellos cobraban sólo el 50% de regalías que cobraban a nivel nacional, es decir, sólo el 0,5%!!…(sic)”

Apasionado y muchas veces polémico, Litto Nebbia cuenta todo. A cincuenta años de «La balsa», el pionero del rock nacional ha sido el primero en casi todo, en no tener prejuicios ni fronteras musicales con géneros y autores, cruzando el rock con el jazz, la música popular brasileña, el folklore, el bolero, y animándose a aventuras nunca antes atravesadas.

Además de contar el origen de La Balsa, cuando Tanguito lo llamó para mostrarle el inicio de la canción en el baño de la Perla de Once,…»En el mismo tiempo que dura la canción, escribí delante de él la letra completa» cuenta Nebbia como al pasar.

Litto desentraña el origen de sus temas más famosos, «Viento, dile a la lluvia», «Rosemary», «El otro cambio, los que se fueron», «Nueva zamba para mi tierra», «Quien quiera oír que oiga», «Sólo se trata de vivir» y «El rey lloró»; tema con el que eligió despedirse cantándolo a dúo con León Gieco, en una presentación llena de recuerdos, sueños y pasiones que convierten a este libro en una obra indispensable para músicos y/o amantes de nuestro rock nacional, en la voz de uno de sus fundadores o como diría el propio Andrelo: el Inventor del invento.

 

by Diego Alvarez

@ytudiras

+ INFO

Facebook

Twitter

www.melopeadiscos.com.ar

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *