La psicodelia invadió el auditorio de la Usina del Arte del barrio de La Boca, el pasado martes 4, pero esta vez de la mano de una banda no tan acostumbrada a dar shows de este tipo. Massacre, ya legendario conjunto de skate punk, mostró una nueva faceta de la mano de “Massacredélica”, una ciclo especial para esta jornada y de la cual no se sabe si se repetirá en alguna otra ocasión. Ante un auditorio lleno y con entrada gratuita, el quinteto supo llevar a los espectadores a un viaje donde el relax y el “flasheo” tuvieron un rol clave.
Guillermo «Walas» Cidade (voz y theremin); Pablo «El Tordo» Mondello (guitarras y pedales); Luciano «Bochi» Facio (bajo y coros); Federico «Fico» Piskorz (guitarra y sintetizador) y Carlos «Charly» Carnota (batería y percusión) arrancaron su actuación con “Bienvenido al mundo de los conflictuados” para darle una introducción instrumental al asunto, y donde ya se podía ver, en las pantallas, imágenes relacionadas a la temática de la velada, con muchos colores y distorsión, algo que se daría a lo largo de toda la noche.
“Cuasi delictual”; “La nave”; “Río siempre”; “Ambas estatuas”; “La epidemia” y “El taxidermista”, entre otras, fueron algunas de las canciones que se escucharon en la primer parte del show, donde ya se podía apreciar a “El Tordo” inspirado, que aportó una cuota importante de su habilidad para que se diera esta atípica versión del grupo. Sin embargo, uno de los momentos más particulares del concierto fue cuando, para “La orquídea blanca”, Walas subió las escaleras que llevan desde el escenario a los costados del recinto, para ver a sus compañeros seguir con la interpretación, muy cerca de algunos fans.
Tras “Lo mio no es tan grave” (con aires de bossa nova) y “Muñeca roja”, hubo tiempo para que todos le dedicaran un feliz cumpleaños al baterista, con cantito y torta de por medio. Seguido, se reversionaron tres temas de bandas internacionales: “All Tomorrow’s Parties” (The Velvet Underground, solo la primer estrofa); “Time” (Pink Floyd) y “Pompeii Am Götterdämmerung” (The Flaming Lips).
Algunos factores a destacar a lo largo de la fecha: en lo musical, la fusión sintetizadores-guitarra de “Fico” y Mondello para darle la esencia al resultado final; en lo visual, la belleza del lugar y el juego de luces indicadas para el formato (la mayor parte del tiempo, tenues) y en lo emocional, la constante interacción del vocalista con sus seguidores (ya sea para saber si iba todo bien o para contar breves anécdotas).
Una breve pausa marcó que ya se aproximaba el final. Y así fue: “Sofía, la super vedette” y “From your lips” fueron los hits elegidos para concluir una presentación diferente de Massacre, a pura psicodelia y con el objetivo de disfrutar en tranquilidad de su arte. Los pogos y el skate punk volverán este viernes 14, cuando el Club Tucumán de Quilmes los reciba para un nuevo recital.
by Alan Pomian
alan@musicasincomprimir.com.ar
Fotografía gentileza de Guillermo Bosch
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