PRENDER UN FUEGO – Marilina Bertoldi

Disco recomendado del mes

«Prender un fuego»

by Marilina Bertoldi

 

 

Como esa llama que arrasa con todo, pero da pie a que surja algo nuevo, Prender un fuego, el nuevo álbum de Marilina Bertoldi, salió a la luz hace unas semanas en las plataformas digitales. Tras su lanzamiento en Niceto Club y con el éxito de Sexo con modelos todavía fresco, la producción asoma como una de las más prometedoras del año y Música Sin Comprimir la eligió como #DiscoRecomendadodelMes para analizar sus trackas en detalle hasta que no queden ni cenizas. 

 

 

O no? inaugura esta placa e inmediatamente nos remonta a la distorsión que poseían algunas canciones de Sexo con modelos (su disco anterior), quizás con el puesto de la más visceral de las composiciones, donde la cantante se expresa por momentos con una voz casi furiosa. Parecería una especie de crítica a la superficialidad y al estancarse en un estándar de personalidad, con la invitación a plantearse la veracidad de lo descrito.

Ya en un tono más bailable, Fumar de día (primer corte de difusión, con videoclip) denota la influencia del gran Rey del Pop, Michael Jackson, con una melodía funky y pegadiza (como RACAT, que finalmente no formó parte de la placa), en lo que conforma el indicio de la esencia y estructura de la primera parte del trabajo.

 

 

La casa de A relata la proyección a futuro de lo que sería una ruptura amorosa, con un sonido similar al precedente tema, pero con menos alegría y más guitarras que hacen chasquear los dedos al son del ritmo. Con algunos atisbos de blues al final, pero con un rock tranquilo como centro, Nunca continúa la situación narrada en la letra pasada, ya con el planteo del motivo de ese descontento en la relación.

Correte, con un contenido breve pero contundente, refleja la conclusión de ese lazo afectivo en carne propia con la frase “Si no hay amor, que no haya un carajo” como eje, con un sube y baja en la presencia de las violas. Como detalle adicional, se escucha una especie de conversación telefónica a modo de discusión. Destino de hit asegurado.

Desde aquí, se genera el quiebre auditivo en el LP, donde el rumbo se torna más espacial y baja unos decibeles. Es inevitable transportarse a su pasado en Connor Questa o a composiciones anteriores de su carrera solista como Órbita de adiós o Unbreak me

El uso de los característicos loops a los que nos tiene acostumbrados Marilina tiene un rol protagónico en China, por momentos experimental y por otros más rockera. Tito volvé llama la atención desde ya con su nombre, pero además tiene una contraposición de una mujer que extraña y que, asimismo, echa en cara defectos del hombre, todo en una mixtura de sonidos cuasi lisérgicos y otros más movidos.

Intervalo se apersona con teclados que forman su estructura, aunque la batería tiene su momento para destacar entre la oscuridad del track, en el que además se puede notar una exhalación, como si hubiese un cigarrillo de por medio. En Techo los sintetizadores toman la posta, con algunos toques de psicodelia que expanden esta nebulosa artística.

Remis cuenta con efectos en las guitarras, en una melodía relajada u onírica y con la espera como eje temático, desde un lado sentimental. Una especie de balada, con horizonte de éxito como corte.

Por último, Prender un fuego recuerda a la impronta de su disco La presencia de las personas que se van, con tiempos más lentos, voces plagadas de ecos u otras modificaciones y un final algo retro.

 

Así, Marilina Bertoldi da un paso más en su ascendente carrera, esta vez con un contenido que resalta más desde la totalidad que de lo individual, con una clara reinvención como referente de la escena actual.

by Alan Pomian

alan@musicasincomprimir.com.ar

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