Una fecha que prometía mucho se presentaba en Zadar Club de Wilde (Av. Mitre 6675) de la mano de O’Connor, quien por primera vez mostraba en el Sur su nueva placa titulada La Grieta.
Antes, tres bandas invitadas fueron las encargadas de ir abriendo la noche, comenzando por Cloud Of Shadows, quinteto que se dedicó a presentar algo de material de su primer trabajo, titulado The Skies are Screaming, más algunos temas de lo que será su segundo disco, ambos cantados íntegramente en inglés, en una atractiva mezcla de heavy metal con screams y sintetizadores.
La segunda banda encargada fue Gusano’s Hellmachine, conjunto un tanto más cercano al Groove Metal, con un buen séquito que se animó a empezar a poguear un poco y a armar los primeros círculos de la muerte de la noche. Sonaron temas como “Vive”, corte difusión de su último disco, “Este No Es El Fin”, “Ira”, “Valorándome” y un tema sin nombre (ambos nuevos), y cerraron con “Tu Memoria” y “Falsos Profetas”.
Entre varios aplausos, se despidieron para darle lugar a Víctimas, tributo a la H, que estuvo haciendo de las suyas agitando al público con clásicos como «Gil Trabajador«, «Sepulcro Civil«, «Tu Eres Su Seguridad«, «Masa Anestesiada» y demás. Toda la fiesta debajo de las tablas fue registrada con una cámara colocada al inicio del show por los mismos integrantes. Con la gente a punto caramelo, ya estaba todo listo…
Con «Diminitudes«, perteneciente a su último trabajo, arrancó una vez más Claudio O’Connor, acompañado en este caso por Karlos Cuadrado, en reemplazo de Hernán García, Pablo Naydon en batería y Fernando Cosenza como única guitarra.
En un show enchufado desde el principio, el vocalista arremetió no solo con cortes de esta última placa, muy bien recibida, sino también con varios de sus clásicos caballitos de batalla de sus más importantes placas, haciendo hincapié en Río Extraño.
Temas como «Pagando Por Mi Actitud«, “La Maldad” y «Quien Pudiera» fueron sonando uno con más fuerza que el otro y con un sonido inmejorable (de hecho, estuvo Mario Breuer acompañando a la banda tras la consola).
Fiel a su estilo, el frontman pasó gran parte del show casi sin hablar con el público, únicamente limitándose a agradecer, a bromear con el público haciendo caras, y a seguir con el próximo tema, a la vez que la gente pedía más y más. Los integrantes que completan la formación arengaron desde sus posiciones, ya sea poniendo el bombo al ritmo de los cánticos o con un simple ademán.
Para el final, el tema que le da nombre a la placa lanzada en el año 2010 y «Se Extraña Araña» parecían darle el cierre definitivo a la velada. Pero ocurrió algo casi impensado una vez finalizado el encuentro: Mientras la banda se despedía y empezaba con la clásica repartija de púas a la multitud, escucharon el grito de «Una más y no jodemos más».
Cuando se cerró el telón, parecía que no se iba a cumplir ese deseo…pero de repente se abrieron de vuelta y «Memoria de Siglos» de Hermética fue la frutilla del postre necesaria para poder cerrar una noche a puro hard rock y heavy metal en el Sur, mientras los fanáticos despedían al cuarteto al grito de «La H no murió«.
by Lucas Boltrino
Contacto: lucas@musicasincomprimir.com.ar
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